Os cuento las propiedades del bacalao:
Este alimento pertenece al grupo de los pescados blancos.
El bacalao fresco es un alimento rico en yodo, ya que 100 g. de este pescado contienen 170 mg. de yodo.
La abundancia de yodo que se puede encontrar en este pescado es beneficiosa para nuestro metabolismo, regulando nuestro nivel de energía y el correcto funcionamiento de las células. Además, el yodo del bacalao fresco, ayuda a cuidarnos por dentro, regulando nuestro colesterol. También ayuda a procesar los hidratos de carbono, fortalecer el cabello, la piel y las uñas.
Ya lo veis, súper sano! Así que vamos al lío.
FUENTE: "alimentos.org"
Ingredientes:
- Bacalao fresco cortado en lomos
- Tomate frito o casero
- 1 cebolla
- 2 dientes de ajo
- Harina
- 1 ramillete de perejil fresco
- Sal y Pimienta negra molida
- Aceite de oliva
Preparación:
En una sartén con un buen chorro de aceite, sofreímos la cebolla pelada y cortada en juliana. Añadimos también los ajos pelados y troceados. Dejamos que se dore un poquito.
Salamos los trozos de bacalao y los pasamos por un poco de harina. A continuación colócalos en la sartén con cuidado y deja que se doren por ambos lados.
Deja cocinar hasta que el pescado,la cebolla y los ajos estén dorados. Añade un poco más de aceite si lo ves necesario. Ahora lava el perejil y ponlo picadito.
Vierte el tomate sin que llegue a cubrir el pescado y deja que cueza a fuego lento unos minutos, hasta que haya ligado y cogido consistencia todo. Prueba de sal y añade un poco de pimienta.
Sirve caliente, templado o incluso frío! De cualquier modo estará delicioso.
En una sartén con un buen chorro de aceite, sofreímos la cebolla pelada y cortada en juliana. Añadimos también los ajos pelados y troceados. Dejamos que se dore un poquito.
Salamos los trozos de bacalao y los pasamos por un poco de harina. A continuación colócalos en la sartén con cuidado y deja que se doren por ambos lados.
Deja cocinar hasta que el pescado,la cebolla y los ajos estén dorados. Añade un poco más de aceite si lo ves necesario. Ahora lava el perejil y ponlo picadito.
Vierte el tomate sin que llegue a cubrir el pescado y deja que cueza a fuego lento unos minutos, hasta que haya ligado y cogido consistencia todo. Prueba de sal y añade un poco de pimienta.
Sirve caliente, templado o incluso frío! De cualquier modo estará delicioso.
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